Cada vez son más las personas que están trabajando en el desarrollo de su inteligencia financiera. Para ello, debemos cambiar muchas cosas en nuestra mente, que se ha formado una idea errónea de cómo funciona el dinero.
Nos han educado en una pauta que podríamos simplificar en “gana más, para gastar más” y así vamos avanzando en el escalafón laboral: buscamos un nuevo puesto o un nuevo trabajo para ganar más dinero y, supuestamente, para mejorar nuestra situación actual de gasto. El problema es que, al lograrlo, creamos nuevos gastos que nos obligan a seguir buscando nuevas oportunidades de crecimiento.
Como romper este círculo
En primer lugar, debemos pensar que la riqueza es infinita y que está a nuestro alcance. ¿Has pensado qué haces con tus ahorros? ¿Están en una cuenta corriente bancaria que no te da rendimiento? Incluso es posible que te genere más gastos que beneficio. Es muy posible que, pese a que tu ahorro crece porque destinas una cantidad para hacerlo, en realidad no estés logrando ningún rendimiento.
Rompe con todo esto y piensa en sacar partido de tus ahorros. ¿Has pensado en invertir? Mucha gente lo está haciendo y consigue que esos ahorros le rindan en mayor o menor medida, tomando decisiones más o menos arriesgadas.
A mayor rendimiento, mayor riesgo
Existen infinidad de opciones de inversión: bienes inmuebles, bonos, deuda, acciones, materias primas, inversión en start-ups, divisas o criptomonedas. Cada una de ellas es más segura o, utilizando la terminología correcta, más volátil. Este último término se refiere a valores que tanto pueden generar grandes ganancias como hacernos perder todo nuestro dinero. Así que, podemos hacer rendir nuestros ahorros, pero debemos hacerlo con cabeza.
Una de esas inversiones volátiles, es decir que tienen mucho riesgo es la de las criptomonedas. Es una inversión de mucho riesgo y debemos acudir al mercado muy bien informados y asesorados, si no queremos perderlo todo. Para invertir en este tipo de valores podemos utilizar alguna de las mejores apps de criptomonedas.
En este punto, hay que decir que gracias a la tecnología, cualquier persona puede convertirse en inversor y, además, puede invertir en cualquier mercado del mundo desde su dispositivo móvil. Esto quiere decir que la inversión se ha democratizado y no solo está al alcance de unos pocos. Todo el mundo puede hacerlo, eso sí, con la cabeza puesta más a medio plazo que en un beneficio inmediato.