La capacidad de las BIOS de chipsets ‘antiguos’ está generando problemas para ofrecer soporte a los AMD Ryzen 3000 y a otras características.
Cuando AMD lanzo la primera generación de procesadores se dieron bastantes problemas, sobre todo por BIOS. Aquellas placas base llegaron con BIOS muy verdes que generaban problemas con la RAM. Se estan volviendo a repetir aquellos problemas y ahora se añaden algunos nuevos. El problema actual es que cualquier placa base con chipset AMD 400 Series y 300 Series deben ser compatibles con los Ryzen 3000.
MSI ha revelado que la memoria Flash SPI del chip EEPROM que debe albergar el firmware UEFI de la nueva BIOS tiene una capacidad limitada. Parece ser que el microcódigo AGESA ComboAM4 1.0.0.3a es muy grande y está dando problemas en las BIOS beta. Tanto es así que se han suprimido soporte para procesadores Athlon y APU A-Series Bristol Ridge @ 28nm.
Problemas con las nuevas BIOS de AMD
Este problema no es nuevo. Algunos fabricantes ya avisaron que por el tamaño la BIOS no podían dar soporte a los Ryzen 2000 en determinadas placas. Ya con dos generaciones de procesadores Ryzen, más las APU, más los Athlon, más los A-Series, la BIOS estaba casi llena. Son muchos procesadores y el tamaño de la BIOS es limitada. Ahora se amplía el problema al tener que soportar no solo los Ryzen 3000 sino que también las nuevas APU.
Y el problema va más allá, porque MSI habría eliminado el soporte para configuraciones RAID. Aquel que tenga una de estas configuraciones en sus unidades de almacenamiento, vera como estas se corrompen.
Se han tenido que hacer muchos recortes, como la aplicación integrada UEFI para la BIOS 5. Se la ha denominado ‘GSE Lite’, porque se le han suprimido muchas características de la aplicación original. La interfaz de usuario ahora es en 2D sin animaciones y a una resolución muy baja.
Pero es que estamos hablando de en el mejor de los casos, ya que hay placas base con una EEPROM de 16MB. Esto obliga a que las prestaciones de la ROM se deben reducir aún más para dar soporte a los Ryzen 3000. Algo que se corrige en el chipset X570, que integra 32MB. Pero es que este chipset, pese a todo, no ofrece soporte para los Ryzen de primera generación ni las APU Ryzen correspondientes.
¿Qué hacer en estos casos?
Lo primero, si no vamos a dar el salto a los Ryzen 3000, es no actualizar la BIOS. Si lo hiciéramos y tuviéramos alguno de los procesadores que se soportan, no arrancara el sistema. Pero es que si tenemos una configuración RAID y actualizamos, es posible que perdamos todos los datos. Un problema bastante grave que los fabricantes estan viendo como solucionan.
Fuente: TPU