Jamie Dimon, el CEO de JP Morgan dice que no hablara más sobre el Bitcoin y las criptomonedas, pero no pierde oportunidad para atacar y ningunearlas.
‘En la terra humida escric: “nena, estic boig per tú”’ (En la tierra mojada escribo: “nena, estoy loco por ti.” / Boig per tú. Sau). Esto es lo que entiendo que dice Jamie Dimon al Bitcoin. Dimon, el famoso CEO de JP Morgan que, pese a decir que no hablaría más del Bitcoin y la criptomonedas, no pierde oportunidad para hablar de estas. El usurero y especulador, lo que no entiende es que economías deprimidas por especuladores como el de América del Sur, América Central, África o Asia, ven en las criptomonedas, un medio para conseguir capitales y subsistir.
Dimon ha dicho: ‘Si se puede hacer digitalmente con el blockchain, que así sea. Pero seguirá siendo una criptomoneda de un dolor. El problema que tengo es que es una criptomoneda no fiduciaria. Asi el crypto dólar, euro o yen, están bien. Personalmente no entiendo el valor de algo que no tiene valor real.’
Las declaraciones de Dimon, son lógicas, para alguien que gana millones al año, robando a pensionistas, trabajadores y otros, mediante la usura. Rusia o China trabajan en sus propias criptomonedas, Brasil estudia aprobarla, algo que potenciaría su economía, Japón las regula y no ha pasado absolutamente nada. Corea del Sur es otro país que regula las criptomonedas y las apoya. Suiza permite las ICO y los activos fiduciarios basados en el blockchain, son permitidos, siempre que cumplan las normas regulatorias del país. La SEC de Estados Unidos ya se ha interesado por regular las ICO.
Estamos viendo como desde algunos sectores económicos, como la banca tradicional, fondos de inversión, especuladores y otros, temen a las criptomonedas, porque les quitan dinero para sus cosas de ricos, que los trabajadores solo vemos desde la distancia. Las criptomonedas se basan en la economía distributiva y permiten el acceso a todos, solamente necesitamos conexión a internet. El otro problema es que no pueden manipular su valor de manera eficiente, si no es con ataques directos, difamaciones, insinuaciones y similares.