Tim Cook dice que si no nos gastáramos tanto en cafés de lugares agradables donde los sirven, podríamos comprar un iPhone X, ya que solo cuesta 33$ al mes.
El pasado viernes se puso a la venta el ultimo pedazo de chatarra desarrollado por Apple, el iPhone X, el cual no aporta absolutamente nada nuevo al mercado y cuyo único logro es valer más de 1000€, concretamente el modelo de 64GB tiene un precio de 1.159€ y el modelo de 256GB tiene un precio de 1.329€. Modelo de 128GB no hay. El precio de estos terminales ha sido duramente criticado, pero el CEO de Apple, Tim Cook, durante el lanzamiento del terminal, hablo claro en la Apple Store de Palo Alto, en California, donde fue para ‘vender’ los primeros terminales.
Cook ha querido vender la idea de que el iPhone X es un terminal que está al alcance de, prácticamente, cualquier persona, el cual podrá ser comprado por solo 33$ al mes, si se financia. Cabe destacar que el terminal en estados unidos, cuesta 1.149$, que al cambio son 989€. El CEO de Apple además ha dicho que es más económico que comprarnos un café ‘en uno de estos agradables lugares para tomar café’, haciendo clara referencia a Starbucks y además, ha añadido que el precio se reduce, si llevamos nuestro viejo iPhone en hasta 350$.
Desgraciadamente, desde que falto Steve Jobs, Apple vive en una espiral de decadencia y de ridículo en ridículo. Terminales que explotan, que se doblan de llevarlos en el pantalón o sencillamente, terminales que no llevan ninguna tecnología innovadora, ya que todas las que lleva este terminal, se pueden encontrar en terminales Android. Este comentario, deja clara la prepotencia y el absurdo en el que se ha convertido la compañía de la manzana mordida y como se les ha subido a la cabeza la ‘exclusividad’. Los que se compran un terminal de más de 500€ (tirando muy por lo alto), ya tiran bastante dinero por un terminal que usaran para WhatsApp y postureo, pero el que compra un producto de Apple y más este, es que le gusta ser estafado.