La NASA en colaboración con Goodyear, ha desarrollado una rueda sin aire y con memoria

Goodyear y la NASA han desarrollado la rueda definitiva, una rueda sin aire, capaz de enfrentarse a cualquier terreno sin problemas, que está fabricada en titanio y niquel.

Seguro que todos habéis oído alguna vez la expresión de ‘no trates de reinventar la rueda’, es una expresión bastante clásica, cuando se hace referencia al intento de mejorar o reinventar algo que ya existe sin un resultado exitoso. El problema de las ruedas con aire es que se pinchan y además, las ruedas usadas en coches, motos y bicicletas se desgastan con el pavimento. Esto es un problema, por eso hay muchos que buscan desarrollar una rueda que tenga una vida más larga y sin aire, para evitar pinchazos y parece ser que la NASA lo ha conseguido.

La NASA ha desarrollado una rueda especial pensando en futuras misiones a Marte y que podría dar el salto al mercado comercial, como por ejemplo, los paneles solares o los PLC o autómatas, desarrollados para la carrera espacial. Han desarrollado lo que se ha dado a conocer como neumático superelastico y que quiere reemplazar al neumático tradicional. Entre las características de esta rueda, destaca que, en teoría, no sufre desgaste, está fabricado en metal y es capaz de mantenerse firme sin importar cuanto pese el vehículo o el tipo de terreno por el que debe circular.

Esta rueda ha sido desarrollada en el Centro Glenn y ha sido un proyecto conjunto de la NASA y Goodyear, quienes aseguran haber desarrollado la rueda más elástica del mundo. Se basa en ruedas similares a las usadas en la misión Apollo y se ha desarrollado con un sistema en forma de malla y el material usado es el titanio con memoria de forma. Este material se ha vuelto muy común en el mercado y se usa desde vehículos, hasta accesorios que podemos tener por casa. Este titanio tan particular es una aleación de titanio y níquel, que permite que el titanio, un elemento duro y resistente, gracias al níquel, obtenga una gran elasticidad sin deformarse y además, es muy ligero. Tiene la capacidad además de soportar temperaturas extremas sin problemas, no requiere de aire o cámara interna, siendo esta rueda totalmente hueca.

Ahora mismo están en test con esta rueda, montado en vehículos todoterreno, con un resultado excelente, contando con una tracción bastante parecida a la de un neumático comercial para el verano. La gran durabilidad lo hace perfecto para misiones especiales, tareas militares o industriales. Este producto es muy nuevo y el proceso de fabricación aun es extremadamente costoso, por lo que es inviable para cualquier finalidad por el coste, incluso para vehículos espaciales. La NASA trabaja en reducir los costes de fabricación y mejorar el proceso, algo que se dará con el tiempo y el desarrollo, haciéndola ideal primero para viajes a otros planetas y posteriormente para usarse en vehículos convencionales.

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