Para paliar la actual escasez de semiconductores que está afectando tanto a la industria tecnológica, una de las salidas más a largo plazo es la de crear más fundiciones de forma que si baja la demanda y luego vuelve a subir, se estará preparado para poder aumentar la producción. También haría que muchos productos tengan un menor coste de envío, ya que no todos se enviarían desde China o Taiwán. Intel ha visto esto y junto a las fundiciones que va a hacer en Estados Unidos y en Europa, van a invertir 1.000 millones de dólares en la industria de fundiciones en general.
Intel planea invertir en tecnologías disruptivas para el ecosistema de fundición. La prioridad sería similar a la de la reciente ley europea, ya que se trata de acelerar el tiempo de diseño, de fabricación y de comercialización de los productos.
Va a invertir en las propias fundiciones
Este plan se forma con una asociación entre Intel Capital e Intel Foundry Services. IFS ha sido creada por la empresa como parte de su estrategia actual para satisfacer la demanda mundial de productos electrónicos. Parte del objetivo es trabajar con una plataforma de chips abierta y utilizar productos modulares para múltiples arquitecturas, como x86, Arm y RISC-V.
RISC-V es una arquitectura de conjuntos de instrucciones libre y abierta dirigida por la organización sin ánimo de lucro RISC-V International. Trabajan con Google, Huawei, Western Digital e Intel, y al ser abierto, no se necesitará licenciar ninguna patente para su uso, lo que haría mucho más accesible su fabricación.
Dependiendo del nivel de afiliación que tenga Intel en la plataforma, podría darle un puesto en el consejo de administración. Dado que RISC-V se basa en el espíritu de colaboración en la innovación de los procesadores, esto podría suponer grandes cambios para el desarrollo futuro de los semiconductores en todo el mundo.
Fuente: PC Gamer