Según varias fuentes al declarado al periódico japonés Nikkei Asia, los fabricantes de chips que intentan ampliar su capacidad de producción se están encontrando con plazos de entrega cada vez más largos. En algunos casos alcanzan los 18 meses de espera desde la solicitud hasta la fecha de llegada estimada de los materiales.
Muy seguramente afecte las nuevas fábricas de semiconductores de empresas como Intel y TSMC. Esto significaría aún más limitaciones de suministro, y aún más largas de lo que se pensaba para los productos electrónicos de consumo.
La cadena de montaje sigue teniendo graves retrasos de materiales
Los requisitos de las materias primas están aumentando, dado que cada vez se demandan más y mejores productos electrónicos con conectividad. Estos problemas de suministro de semiconductores han estado afectando a los precios y a la disponibilidad de algunos componentes. Se han anunciado inversiones multimillonarias para mejorar capacidad de fabricación. Tienen como objetivo aliviar el problema y de garantizar un crecimiento sostenible de la industria en los próximos años. Al diversificarla en varios territorios esperan no depender enteramente de la situación política de China o de territorios cercanos a Rusia.
Pero las ampliaciones de capacidad requieren de enormes cantidades de semiconductores en sí, lo que significa que el aumento de la producción en el futuro implica limitar el suministro actual. También faltan profesionales especializados, lo que llevado a Intel a crear un fondo multimillonario destinado a atraer talentos tecnológicos. TSMC planea construir una fábrica en Arizona, que ya está sufriendo retrasos en su construcción debido a la falta de trabajadores.
ASML, Applied Materials y otros fabricantes avisan a sus clientes que el tiempo de espera para los nuevos pedidos se sitúa ahora en los 18 meses. En el caso de ASML, ya habían advertido que sus propios proveedores tenían dificultades para aumentar la producción. Según el presidente de Unimicron, los plazos de entrega de los sustratos que manejan han pasado de los 12 a 18 meses de 2021 a 30 meses.
Las firmas más pequeñas de la cadena de suministro de semiconductores se enfrentan a un panorama difícil. Pueden invertir en el aumento de su producción para hacer frente a las limitaciones de la oferta actual y la futura. Pero al hacerlo, podrían encontrarse con demasiada capacidad cuando la demanda baje cuando se haya satisfecho. La otra opción es que, simplemente, los largos plazos de entrega y los retrasos de la cadena de montaje para los fabricantes más pequeños se van a convertir en algo habitual.
Fuente: Tom’s Hardware