Black Mirror: Bandersnatch, una película interactiva bastante más que floja

Ya está disponible en Netflix la película interactiva Black Mirror: Bandersnatch, una película bastante floja que si no fuera por la interacción, la quitarías.

Hoy se ha puesto a disposición del público en Netflix la película interactiva ‘Black Mirror: Bandersnatch’ Esta película está ambientada en 1984. En ella nos encontramos con un joven programador que quiere adaptar una novela fantástica bastante caótica a un videojuego. Dentro se va mezclando el mundo real y el virtual y el protagonista incluso se llega a plantear su propia realidad.

Black Mirror: Bandersnatch, elige los derroteros de la película

Lo que llama o está llamando la atención es el formato de la película y no su contenido, del que hablaremos más adelante. Antes de proyectarse se nos insta a tener cerca el mando o el ratón. Estos elementos son fundamentales, ya que podremos elegir como fluye la trama y serán claves para la conclusión. Se van tomando decisiones de manera fluida sin que la trame pare.

Durante unos diez segundos, que es el tiempo que se da al espectador, observamos como el personaje espera a nuestra decisión. Tras esos momentos, en el que el personaje parece estar analizando la decisión, nosotros decidiremos qué sucede.

Decide sobre una trama bastante floja [ACHTUNG! SPOILER!]

La historia de un joven programador de videojuegos en 1984 es floja. El protagonista busca adaptar Bandersnatch, un libro donde elijes el camino del personaje, a un videojuego. Durante la trama podremos elegir diferentes opciones para el protagonista.

Una vida complicada que cambia cuando de niño su padre le coge un peluche y se lo esconde. Esto provoca que su madre pierda un tren y tenga que coger el siguiente, el cual descarrilla y muere. El culpa al padre de lo sucedido, algo que explica a la sicóloga.

Empieza a trabajar en la reciente compañía de videojuegos Tuckersoft, una nueva compañía de videojuegos. Su primer juego Metl Hedd es una clara referencia a Metalhead, el quinto capítulo de la cuarta temporada de Black Mirror. Allí conoce a Colín, un programador de videojuegos que en la época parece ser conocido y que trabaja en su propio juego.

A medida que la película avanza vamos tomando diferentes decisiones, desde vánales cómo elegir unos cereales a otras más importantes, como matar al padre del protagonista. Hay un momento incluso en el que entiende que hay alguien que maneja su vida y empieza a actuar según sus recomendaciones.

Lo único salvable, la broma futurista

Dentro de las diferentes decisiones que podemos tomar, en una el protagonista nos pide que el hablemos. Aquí podemos elegir entre varias opciones. En las primeras aparecen símbolos y abreviaciones, pero después de varias interacciones nos aparece la opción de decirle que somos Neflix. Se le explica un poco que es hasta que te lo puedes saltar. Es quizá la única parte graciosa de la película.

¿Rompe con la línea de Black Mirror?

Hasta el momento la serie solita tratar aspectos aparentemente negativos de la tecnología. Esta película sí que tiene la tecnología como protagonista, pero quizá tenga poco que ver con la idea de la serie. Pese a que el programador y tiene que ver con los videojuegos, los problemas psicológicos parece que estaban ahí.

Quizá trate de advertir de los problemas de obsesionarse con la tecnología o quizá no. La verdad es que en algunos momentos incluso se llega a perder el hilo. Podríamos  decir que si no fuera por la interacción, sería un tostón y terminarías quitándolo.

Trama revelada en Reddit

Un usuario de Reddit a las cuatro horas de estar publicada la película ha subido un diagrama de flujo donde vemos que sucede según todas las decisiones que podemos ir tomando. Esta muy bien, ya que nos podemos hacer una idea si no queremos comernos el latazo de película.