Los discos de estado sólido o SSD se están planteando como una revolución de los servicios en la nube debido a la alta velocidad que tienen. Los discos duros físicos siguen siendo la opción ideal para el almacenamiento masivo de archivos de pequeño y gran tamaño, pero la velocidad de los SSD nos presenta una revolución conocida como Hosting SSD server, que permiten manejar mucho más que datos.
Con motivo del teletrabajo que permite tener una oficina en cualquier parte del mundo, el acceso al servidor de la empresa para trabajar simplemente precisa de uno de los netbooks más asequibles del mercado. Gracias a la potencia de un SSD en la nube, se puede tener una máquina virtual de Windows en la nube a la que podemos acceder incluso desde un móvil en la playa.
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La tecnología de los SSD y el poder de la nube
La idea de usar un Hosting para Windows con la ayuda de las velocidades de un SSD nos permite crear una máquina virtual para albergar nuestro ordenador virtual de Windows accesible desde cualquier parte del mundo. Con ello tenemos la rapidez de ejecución de los SSD para cargar un sistema operativo entero como es Windows 10, y la seguridad de que nuestros archivos importantes estarán bajo varias capas de protección en la nube y no vamos a perder nuestros datos si nos roban el portátil. No es solo útil a nivel individual, sino que en el ámbito de empresas, simplemente teniendo los servidores en un hosting mediante SSD, aumenta la velocidad de las transferencias, que en términos
Eso para la parte de usuarios, porque para las webs, un hosting en un SSD hace que la web pueda cargarse mucho más rápido. Si no es una web que requiera de constantes actualizaciones, como puede ser una web personal de un artista freelance, la velocidad que ofrece un SSD hace que los visitantes y servidores de búsqueda puedan ahorrarse preciosos milisegundos de espera cuando carga.
Es por esto por lo que el hosting con SSD se va a volver uno de los servicios más demandados y clave para el futuro digital que se avecina. Una mayor velocidad para mover una web con cientos de visitas o un entorno de trabajo con miles de usuarios a nivel mundial. Los servidores dedicados a almacenamiento masivo gracias a los discos duros externos y las constantes necesidades de albergar grandes archivos, pero el grueso del trabajo recaerá sobre los SSD, una tecnología de almacenamiento que está siendo adoptada y mejorada de forma exponencial.
¿Velocidad o almacenamiento? El hosting también tiene sus opciones
El debate de si usar disco duro o SSD en el almacenamiento en local ahora se ha trasladado a la nube. Sí, un disco duro nos ofrece una gran cantidad de almacenamiento a un precio muy accesible. Pero hoy día la velocidad navegando por internet se aprecia mucho, sobre todo en webs destinadas a servicios como puede ser la venta de productos o los servicios de bases de datos.
Cientos de usuarios a la vez tratando de acceder a la base de datos de un servicio, o queriendo comprar por una tienda online van a ser despachados mucho más rápidamente si la web está alojada en un hosting SSD que en un disco duro. A no ser que la web vaya a albergar muchas copias de seguridad y elementos pesados internos, estos pueden fácilmente externalizarse en u hosting tradicional, en conjunción con el servicio almacenado en un SD.
Además, la tecnología con los SSD avanza tan rápidamente que un SSD puede fácilmente albergar grandes cantidades de almacenamiento que deban de ser accesibles rápidamente. También es muy útil si tenemos que hacer muchas copias de seguridad rápidamente.
La accesibilidad del hosting web y en SSD
Hace años, una web era una inversión grande. Grandes empresas eran las que podían permitirse tener un hosting de calidad, con un buen almacenamiento y un buen plan para estar a la altura de la demanda. Para alegría de los usuarios, ahora cualquier persona, por muy pequeña que sea, puede tener un hosting de calidad con un plan que le otorgue un gran almacenamiento.
Pero generalmente los usuarios de a pie no necesitan tantos GB de almacenamiento si sus webs van a ser estáticas. Para posicionamiento y usabilidad, la velocidad impera en las necesidades de los usuarios. A un pequeño artista que necesita una web pequeña, no le interesan esos planes de almacenamiento ilimitado, pues necesita que su web se cargue rápido para que la indexación por parte de buscadores le beneficie, o que no tarde en cargar a usuarios captadores que están consultando entre numerosas opciones.
Por eso los SSD para el hosting representan una pequeña, pero muy notable revolución en el almacenamiento de webs. Además, se garantiza una estabilidad y un menor riesgo de daños a los datos debido a la ausencia de las piezas móviles de un disco duro, lo cual es un enorme añadido de estabilidad y seguridad a favor de los SSD.
El futuro que se viene
Claro que el almacenamiento de webs es uno de los muchos puntos a su favor que ofrece un hosting en un SSD. Y esto es solo a nivel de usuarios y consumidores.
Debido a su potencial de alta velocidad, en un futuro se podrán hospedar importantes proyectos de realidad virtual en vivo, o inteligencia artificial trabajada en remoto por numerosos equipos en distintas partes del mundo. La llegada de esta tecnología abre unas enormes posibilidades a proyectos colaborativos, dado que la alta velocidad puede despachar numerosas consultas y enorme carga de datos en vivo sin problemas. La velocidad de acceso es uno de los grandes problemas que ha dado el hosting para el trabajo en remoto de grandes proyectos, con lo que no queda más que esperar a ver qué pueden hacer los grandes entusiastas, los grandes equipos y las startups con algo tan sencillo como que el hosting a nivel de consumidor y de profesionales pase a estar dominado por los discos de estado sólido.
