En un reciente comunicado, Volvo ha anunciado sus planes de incluir la tecnología de Snapdragon en sus actuales coches eléctricos en producción. Comentan que van a dar máxima prioridad a que la transición de los modos de conducción manual a los asistidos en sus coches se realice sin esfuerzo y de forma intuitiva. Igual que el acceso a las funciones a través de las pantallas del coche, quieren presentar lo que el usuario necesita de forma simplificada.
En el Volvo EX90, que será el próximo SUV insignia totalmente eléctrico de Volvo, una gran pantalla central permitirá acceder rápidamente a la navegación, medios de comunicación, el teléfono, a los controles y otras acciones habituales de los conductores. Dependiendo de si estás aparcado o conduciendo, o de si estás hablando por teléfono, una barra contextual especial sugerirá las acciones que tienen más sentido para la situación específica en la que se encuentre el vehículo.
Volvo confía en Snapdragon para mejorar la calidad de sus vehículos eléctricos en su Volvo EX90
Una segunda pantalla más pequeña justo detrás del volante dará información más centrada en la conducción, como direcciones, velocidad actual e información sobre la autonomía. También contextualizará el cambio de un modo a otro, asegurándose de que sabes qué esperar del coche, y qué espera el coche de ti.
Al combinar la detección exterior e interior del coche con el software y la potencia informática central del coche, esperan conseguir un nuevo nivel de comprensión del usuario y del mundo que le rodea. La ambición es que el coche sea capaz de leer cada situación y proporcionar al usuario información contextual basada en esa información. Un conjunto de sensores de última generación ofrecerá una visión completa de 360 grados del entorno del coche, para reaccionar a lo que ocurre a su alrededor de forma proactiva, incluso cuando el modo de conducción asistida está inactivo.
En conducción asistida, el coche informará continuamente de lo que está viendo en ese momento y de la información con la que está actuando. Además de proporcionar apoyo a la dirección y ayudar a mantener una velocidad constante, también al cambiar de carril.
Cuando se está en conducción autónoma, el Volvo EX90 ofrecerá una conducción autónoma sin supervisión. En este modo, el Volvo EX90 estará diseñado para vigilar la carretera a través de su sistema de visión y detección de 360 grados, mientras los sensores interiores vigilan a los pasajeros. Su interfaz de usuario contextual avisará con antelación cuando toque volver a coger el volante y hará que la transición sea lo más predecible y suave posible.
