Ikea propone una caja para guardar los móviles y hablar en la cena de Navidad
Ikea quiere que dejemos los móviles para que las familias hablen en la cena de navidad. Lo llama «caja inhibidora», pero sólo es una caja de cartón.
La cadena de muebles y decoración Ikea ha hecho de «que las familias hablen y se conozcan en esta cena de Navidad» su principal motivo en su campaña navideña. Hace días sacó un vídeo en el que simulan un concurso en el participan varias familias, y que si no aciertan una pregunta, el invitado deben abandonar la mesa.
Preguntas como el grupo preferido del hijo, qué bailaron los abuelos en su boda, o por qué el padre no pudo ser futbolista son las que hacen que los miembros de la familia vean que no se conocen tan bien. Dejamos para otro momento el mensaje con los habituales tintes tecnófobos que evita mencionar que nos podemos conocer a través de Facebook, Twitter o Instagram, que ignora modelos de familias no normativas o que idealiza las cenas de navidad con la familia sin tener en cuenta que puede haber familias con problemas entre los miembros, entre otras desconexiones con la actualidad.
En el anuncio de Ikea empiezan con preguntas sobre Instagram, Twitter, referencias al floss dance y acaban por preguntar sobre las historias y gustos de los familiares.
Esa idea de que los miembros de una familia deben hablar en una cena de Navidad para conocerse y dejar las redes sociales se mantiene en su publicidad online. De cara a las compras de navidad, en su web y correos electrónicos promocionan una «Caja Inhibidora» que cuesta dos euros.
La publicidad la define como una caja ideal para guardar los móviles y disfrutar de la cena, pero no es más que una pequeña caja de cartón. Es cierto que puede hacer que los comensales dejen el móvil en la mesa, pero solamente es una pequeña caja que ni siquiera actúa como jaula de Faraday para que no lleguen mensajes.
Para los interesados, la caja es el modelo Tjena y se puede encontrar en las tiendas de todo el país, e imaginamos que el montaje no debe de ser muy complicado. ¿Quién sabe? Igual esa caja funciona de verdad en tu próxima cena de Navidad.
Fuente: Ikea