TSMC critica los planes de expansión de fundiciones de Intel
El fundador de TSMC ha calificado recientemente de «ejercicio inútil» los intentos de aumentar la capacidad de fabricación en Estados Unidos. Estos son los proyectos de Intel de instalar varias fundiciones en el país para aumentar la producción, tenerla más centralizada en Estados Unidos, más cerca de distribuidores, y para no depender de la situación política de China.
En su intervención en un acto organizado por la Brookings Institution, Morris Chang dijo que cree que las condiciones de la economía y el mercado laboral estadounidenses no favorecen el éxito en el contexto de la fabricación de semiconductores. Citó la escasez de talentos para la fabricación en el país, que durante mucho tiempo ha dado prioridad a otros conjuntos de habilidades, además del coste de la producción de chips en EE.UU., que sería un 50% más alto que en Taiwán.
TSMC dice que Intel tiene buenas intenciones, pero que no le irá muy bien
En los últimos dos años, Estados Unidos se ha mostrado cada vez más decidido a deslocalizar una mayor proporción de la fabricación de semiconductores. La intención viene impulsado por la actual escasez de chips, la interrupción de la cadena de suministro y la agresiva postura de China hacia Taiwán.
La administración de Joe Biden prometió miles de millones de dólares en subvenciones, de los cuales una gran parte de las cuales irán a parar a Intel. A principios de 2021, Intel hizo pública una revisión de su estrategia de fabricación de dispositivos integrados, conocida como IDM 2.0. El pasado mes de enero, la empresa reveló que invertiría 20.000 millones de dólares en un campus de fabricación de última generación en Ohio. Esta instalación de 4.000 kilómetros cuadrados albergará hasta ocho fábricas distintas, lo que la convertirá en una de las mayores instalaciones del mundo. Para reforzar aún más la capacidad de fabricación en EE.UU., Intel también ha anunciado que destinará otros 3.000 millones de dólares a la ampliación de su fábrica D1X en Oregón.
TSMC predice que Intel tendrá dificultades para dotar de personal a sus nuevas instalaciones en EE.UU.. Cree que será difícil para EE.UU. competir a nivel internacional como resultado de las limitaciones de precios. Su predicción se basa en que Estados Unidos ha apostado porque sucederá una guerra entre China y Taiwán, que provocaría el que es para el fundador de TSMC, el único escenario en el que el nivel actual de inversión en la fabricación de chips de EE.UU. tendría sentido comercial. Si dicha guerra no se materializa, el gobierno de Biden se quedaría con una importante pérdida de dinero y poco que mostrar.
Fuente: TechRadar