Denuncian a Google por usar “patrones oscuros” y mentir sobre los datos de localización que recogen
Los patrones oscuros es como se llama a las técnicas de manipulación en la experiencia de usuario para desincentivar acciones como anular una suscripción, o dar información falsa para que el usuario compre algo. Hay una web y movimiento en contra de estos diseños anti-intuitivos y anti-usuarios, y gracias a ello ha salido una demanda contra Google al implementar estos patrones oscuros para seguir recogiendo datos de localización de sus usuarios.
Washington, D.C. y Texas presentaron sus respectivas demandas contra Google el lunes, y se espera que le sigan Indiana y el estado de Washington. Alegan que Google violó leyes de protección de datos al dar a los clientes una falsa sensación de control sobre el acceso de la empresa a sus datos. Afirman que Incluso si un cliente decide no permitir el seguimiento de la ubicación, Google captura y almacena los datos de localización de todos modos.
Google te rastrea la localización quieras o no
Según la denuncia de D.C., Google tiene un incentivo financiero para rastrear los datos de localización de sus clientes dado que su brazo publicitario depende de ello. Afirman además, que Incluso una cantidad limitada de datos de localización recopilados a lo largo del tiempo, pueden exponer la identidad y las rutinas de una persona, con detalles personales como la afiliación política, religiosa, orientación sexual, ingresos, estado de salud o participación en grupos de apoyo, acontecimientos y más.
Estos datos sirven de base a los anuncios que ayudan a Google a vender anuncios, y todos estos datos se siguen mientras afirman que no se les está rastreando la ubicación. La demanda añade que Google hace un amplio uso de patrones oscuros incluyendo repetidos empujones, tácticas de presión engañosas y descripciones evasivas y engañosas de las características y ajustes de localización, para hacer que los usuarios proporcionen más y más datos de localización, ya sea inadvertidamente o por frustración. en resumen, parte de la acusación es debido a que hacen difícil eliminar el rastreo de ubicación a los usuarios.
El portavoz de Google, José Castañeda, ha afirmado en un comunicado que los fiscales generales están presentando un caso basado en reclamaciones inexactas y afirmaciones obsoletas sobre su configuración. Si sale adelante la demanda y se declara que Google en efecto ha mantenido el rastreo de ubicación, deberán de corregirlo y eso implicaría hacer una reforma en la interfaz de usuario.
