Cada vez que hay una nueva versión de iOS, es inevitable que algunos modelos del iPhone se queden atrás por no tener suficiente potencia para moverlo. Hay quien diría que es obsolencia programada, pero pues los sistemas operativos de los móviles son cada vez más multidisciplinares y requieren de cumplir con organismos de seguridad, y no es raro que los modelos más antiguos se queden atrás. Eso mismo va a pasar con modelos de iPhone que no podrán usar iOS 16.
Apple ha dado a conocer hace unos días nuevos detalles sobre iOS 16 en su Conferencia Mundial de Desarrolladores. En esa conferencia aclararon los teléfonos que podrán recibir la actualización, y cuáles no han pasado el corte.
¿Qué iPhone recibirá iOS 16? Los iPhone 8 o superior
Para descargar iOS 16, necesitarás un iPhone 8, lanzado en septiembre de 2017 o posterior. Esto significa que Apple está terminando el soporte para el iPhone 6S, el iPhone 7 y el iPhone SE original.
El iPhone 7 y el iPhone SE fueron lanzados en 2016, mientras que el iPhone 6S fue lanzado en 2015. Esto que significa que estos modelos recibieron casi seis y siete años de soporte de software, respectivamente. Es mucho más tiempo de soporte oficial del que los dispositivos Android han tenido históricamente, a pesar de que Samsung y Google hayan hecho avances significativos en ese departamento. Sus dispositivos de gama media y los buques insignia reciben ahora hasta cinco años de actualizaciones de seguridad.
El iPhone SE de primera generación ha sido sustituido recientemente por un modelo de 2022 que mantiene el botón de inicio de la edición de 2016. Si eres propietario de un 6S o SE y te gusta ese factor de forma, no tienes que renunciar a él todavía. En el caso del SE de 2022, probablemente verá actualizaciones de software en la segunda mitad de esta década. Si tienes un iPhone elegible para la actualización, puedes esperar que iOS 16 llegue este otoño.
Si no lo tienes, a partir de la fecha de llegada de iOS 16, tu móvil puede quedar expuesto, y en algún momento, las apps dejarán de estar operativas, ya que pedirán tener un móvil actualizado. Es el inevitable último paso del ciclo de vida de un dispositivo pensado para estar conectado, que llega un momento en el que ya no puede físicamente estarlo debido a limitaciones que hace años no se sabían.
Fuente: The Verge
