Protestas en Líbano por querer poner un impuesto a las llamadas por WhatsApp
El gobierno de Líbano empezó a cobrar 0,20€ a la primera llamada de cada día a través de WhatsApp. Esta medida levantó protestas violentas en lo que consideran un impuesto abusivo que pagan los menos pudientes.
Los manifestantes y la policía se enfrentaron en Líbano el jueves cuando miles de personas se manifestaron contra el manejo de una crisis económica por parte del gobierno, en una de las mayores protestas que el país ha visto en años. Esta vez fue por un impuesto por el que había que pagar por llamar por WhatsApp. El impuesto era de 0,20€ a la primera llamada del día.
El gobierno decidió renunciar a su plan fiscal, anunciado horas antes, para poner impuestos a las llamadas de voz a través del software de mensajería WhatsApp. La gente expresó su enfado con la élite política en las segundas protestas nacionales en menos de un mes en lo que vienen siendo una mala gestión de la crisis económica.
Los manifestantes bloquearon las carreteras en todo el Líbano con neumáticos en llamas y las fuerzas de seguridad lanzaron gases lacrimógenos contra los manifestantes en el centro de Beirut el viernes temprano, según dijeron medios libaneses. Decenas de personas resultaron heridas, según la Cruz Roja. Las fuerzas de seguridad internas del Líbano aseguran que 60 policías resultaron heridos.
Respuestas a un impuesto a las llamadas por Internet
Las protestas han sido alimentadas por las condiciones económicas estancadas exacerbadas por una crisis financiera en uno de los estados más endeudados del mundo. El gobierno, que ha declarado un estado de emergencia económica, está buscando formas de reducir su enorme déficit.
Líbano se enfrenta a una deuda muy elevada, un crecimiento estancado, una infraestructura en ruinas y entradas de capital reducidas. La libra libanesa, vinculada al dólar durante dos décadas, ha estado bajo presión constante. El querer cargar las llamadas de WhatsApp era un intento a las desesperada de aliviar sus arcas.
El gobierno de unidad nacional del primer ministro Saad al-Hariri está tratando de aprobar un presupuesto para 2020, un paso que puede ayudarlo a desbloquear miles de millones prometidos por donantes internacionales. Pero los donantes quieren que Beirut implemente reformas prolongadas para frenar el derroche y la corrupción. Para algunos WhatsApp es fundamental, Facebook lo sabe y quiere asentar su dominancia con un sistema de pagos que empezaría en India.
Fuente Reuters