El próximo 2018 no será un buen año para el mercado de placas base, ya que se espera una caída en las ventas de un 10% y serán ya varios los años consecutivos en los que las ventas han ido cayendo.
Se espera que el mercado de placas base caigan un 10%, con respecto al mercado general en 2018, tras un año donde ya han sufrido un importante retroceso en cuanto a ventas. Las ventas sobre todo caerán en el mercado de equipos a medida, que representa aproximadamente un 15% del mercado de placas base, según fuentes de la industria. Los envíos de placas base en 2013, fueron de 75 millones y desde entonces han ido en descenso, registrando 50 millones en 2016 y este año 2017, las estimaciones prevén sobre los 43 millones de ventas de placas base.
Gigabyte es una de las compañías que más ha sufrido en esta caída, debido a que actualmente se encuentra en un proceso de reestructuración empresarial, pasando de los 16.2 millones de placas base vendidas en 2016 a los 12.6 millones de placas base vendidos en 2017. Algunos expertos en el mercado, son optimistas con las expectativas de Gigabyte en el próximo año, permitiendo la estabilización en 2018 de las ventas y aumentando las ventas por parte de la compañía, recuperando parte de la cuota de mercado perdida.
Actualmente, el mercado del gaming ha sufrido una importante subida en ventas y esto está permitiendo a las compañías conseguir unas grandes ganancias, gracias a los márgenes de beneficios. Pese a que los últimos años no han sido los mejores para ASUS, sigue liderando el mercado, con un 70% del mercado, algo que limita el campo de actuación de otros fabricantes y les obliga a desarrollar soluciones de más calidad, para robarles una parte del mercado. Debemos destacar que Asustek Computer, engloba a la propia ASUS y a la filiar ASRock.
Fuente: DigiTimes
