Un Super Mario 64 precintado se vende por más de un millón y medio de dólares
Alguien ha pagado más de 1 500 000 dólares por un Super Mario 64 precintado. Expertos avisan que esto no es sostenible.
Con el coleccionismo de videojuegos estamos viendo cómo poco a poco se van pagando más y más por un videojuego precintado. De pasar de pagar unos cientos de juegos por un juego para tenerlo en colección personal, ahora se presume de pagar cientos de miles. Ahora se han llegado al millón y medio con la excusa de ser un Super Mario 64 precintado y en excelente estado de conservación.
| Vista previa | Producto | Precio | |
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 | Super Mario 3D All-Stars | 157,90 EUR | Comprar en Amazon |
Un juego vale millón y medio de dólares por no abrirse
¿Cómo puede ser que alguien pague tanto por lo que es un juego en su día común y que se regalaba con la Nintendo 64? Este Super Mario 64 está precintado, en un excelente estado de conservación con el precinto original y de una de las primeras tiradas. Este detalle es lo que eleva el precio del juego.
Como ya dijimos en un artículo, parte del valor de este juego es que se conserva la caja original y el precinto, que normalmente se tiraban, con lo que para un coleccionista puede tener valor. Pero dudosamente un coleccionista de verdad pagaría tal suma de dinero según ha explicado el experto Pat Contri.
Según Contri, la colaboración entre Wata, Heritage Auctions y un pequeño grupo de coleccionistas de otros hobbys con mucho dinero han elevado el precio del mercado de juegos precintados. Por eso un Super Mario 64, juego tan común como la Nintendo 64; vale para ellos más de un millón por estar precintado. Avisa que en este mercado están entrando muchos especuladores y mucha gente perderá, y todo está siendo manipulador por inversores, no por fans. Es lógico pensar que quien ha comprado este Super Mario 64 no quiere abrirlo y jugarlo o tenerlo en la estantería: lo quiere vender dentro de unos meses esperando tener beneficios, aunque quien más ha ganado son el poseedor original, la casa de subastas y la casa de tasación.
